En su último día en Bahrein, el Papa Francisco mantuvo un encuentro de oración con obispos, sacerdotes, consagrados, seminaristas y agentes pastorales. En su discurso hizo un llamado a no “fingir que no vemos las obras del mal”, no quedarnos en una “‘vida tranquila’ para no ensuciarnos las manos”, que por el contrario busquemos “manifestar el Evangelio con nuestro testimonio…
